El rush de la vida, los cambios inesperados, la carga laboral e incluso la familia nos llevan a vivir un caos interior; este se caracteriza por la sensación de confusión, y una mezcla de ideas negativas, dando lugar a un diálogo interno que absorbe nuestra energía.
Esta carga negativa aunado a nuestras falsas creencias, las cuales normalmente traemos desde pequeños - unas son aprendidas- y otras las hemos adquirido a lo largo de nuestras vidas.
Estas toman un lugar a través de hábitos y respuestas que no nos permiten alejarnos de conductas que ya no son funcionales, provocando que nos quedemos estancados en pensamientos distorsionados.
Ahora bien, ¿cómo podemos hacerle frente a nuestro caos interior? Si bien no es fácil y mucho menos inmediato, es posible hacerle frente al cúmulo de emociones que nos abaten, provocándonos tristeza, enojo y frustración.
3 pasos para hacerle frente a la tristeza.
1. Pregunta correcta. ¿Qué debo soltar para poder crecer? Si deseas tener resultados diferentes, debes tomar nuevas decisiones, redescúbrete y reinvéntate, conserva lo mejor de ti, ámate, acéptate y cambia aquello que no te hace sentir orgullosa.
2. Algo nuevo. Investiga y descubre tus pasiones, atrévete a materializar esos planes que siempre has tenido en mente. Pero también disfruta de lo cotidiano, abraza tu rutina y sorpréndete cambiándola.
3. Respira y regula tus emociones. En muchas ocasiones reprimimos nuestras emociones y en otros momentos dejamos que salgan sin control. Aquí es justo donde aplicas todo lo aprendido en terapia, conviértete en observador de tus emociones, no las personifiques. Es importante aprender a modularlas en cuanto a intensidad, duración y frecuencia.
Cynthia Eglin,
Psicoterapeuta Junguiana